Apague el equipo en caso de funcionamiento defectuoso: Si observa humo, olores extraños o cualquier signo de mal funcionamiento, desconecte la cámara y la fuente de alimentación inmediatamente.
Mantenga el equipo fuera del alcance de los niños: Las piezas pequeñas pueden representar un riesgo de asfixia.
No desmonte el equipo: Las reparaciones deben ser realizadas solo por técnicos cualificados.
No use la cámara en presencia de gas inflamable: Esto podría provocar explosiones o incendios.
Actualizaciones de software: Mantenga el firmware de la cámara y el software de vigilancia actualizados para asegurar la máxima protección y funcionalidad.